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Título: SANTA CRUZ: VELAR PORQUE NO SE CONTAMINE EL AGUA (27/03)
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Argentina - 27/03/2005
En la zona norte de la provincia, informes de la delegación del área ambiental han alertado sobre la contaminación de napas y particularmente de un sector de la denominada Meseta Espinoza, declarada como una reserva acuífera.
En la zona norte de la provincia, informes de la delegación del área ambiental han alertado sobre la contaminación de napas y particularmente de un sector de la denominada Meseta Espinoza, declarada como una reserva acuífera.
Anglesio dijo ayer, en declaraciones al programa Era Hora que se emite por LU 12 Radio Río Gallegos, que la zona norte es la que más afectada está por la actividad, por el impacto sobre el suelo, agua y vegetación, venimos trabajando desde hace tiempo con la Dirección Provincial de Energía y con Recursos Hídricos del Consejo Agrario para delinear cuál es el estado y las líneas de base del recurso agua.
Adelantó que en tal sentido se está gestionando una línea de investigación para determinar toda la cuenca, desde Los Antiguos hasta Puerto Deseado, el estado de las napas, el agua de las reservas y la intensión es obtener un estudio integral para tener un informe definitivo de la provincia. En todo esto trabajamos con la herramienta fundamental que es la Ley de Impacto Ambiental.
En la zona sur en tanto, fuentes relacionadas con el trabajo petrolero han señalado que existen casos en los cuales hay empresas que inyectan agua de producción, sin tratar y con los contaminantes que se utilizan para la extracción de crudo, directamente a las napas desde los pozos que están desafectados.
Anglesio indicó que lo que se debería bombear y por eso hay que controlar, es el agua a la profundidad desde donde se extrae el petróleo, por lo cual no entra en contacto con el recurso de agua que es utilizable, lo importante es que cuando se hace recuperación secundaria de los pozos se extrae el petróleo con la inyección de agua que lo desaloja, pero el recurso no debería ser contaminado, salvo por derrames o filtración de los pozos.
Consultado sobre si no existen detectados casos de contaminación por la reinyección de agua sin tratar, en pozos que no están en producción, el funcionario sostuvo que no, al tiempo que explicó que si el pozo está debidamente impermeabilizado, con todo el proceso lógico del caso, no debería haber contaminación en las napas de agua.
Lo que hay que hacer es controlar los pozos para que estén herméticamente cerrados y que no tengan posibilidad de contactar las napas de los acuíferos con las productivas, algo que se hace como un caso de rutina, pero no quita que en nuestro rol de Estado debamos controlarlo, porque han existido casos donde hay rotura y puede contaminarse el acuífero, remarcó.
El año pasado, Medio Ambiente realizó un estudio sobre el Lago Buenos Aires, donde existían denuncias por posible contaminación, con profesionales del Instituto Nacional del Agua y el Ambiente, que fue presentado en la localidad y en este mismo rubro, Anglesio informó que se va a implementar este año, con el apoyo de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, un plan de monitoreo de los espejos de agua y ríos de la provincia, para tener una línea de base ambiental, es decir, la posibilidad de saber qué tenemos hoy para en un futuro ir cotejando las condiciones de estos lugares año a año.
Esto es fundamental, porque en la provincia no se tienen estos datos para saber cuál es el estado de situación de los recursos, sostuvo el funcionario.
En el tema particular del río Gallegos, desde donde se abastece nuestra ciudad de agua potable, donde a su vez se vuelcan residuos de la actividad carburífera en la zona de Río Turbio, que tiene un sistema de decantación para tratarlos antes de ir al río que luego desemboca en el Gallegos, Anglesio sostuvo que hay estudios hechos y por el momento no se habló de una contaminación, pero sí de una presencia física de sedimentos.
Por eso estamos buscando delinear a través de las autoridades de la mina, que los piletones que se usaban no podrán ser más de lodo, sino de concreto, manifestó Anglesio
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