Título: RIO NEGRO: LA CRISIS ENERGETICA SE PROFUNDIZA Y PIDEN MAS AHORRO (07/07)(Roca Digital)
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Argentina - 07/07/2007
Situación complicada. Ratifican que presas dejarán de generar electricidad
Las imágenes que acompañan este artículo son por demás elocuentes de la situación de escasez de agua en la cuencia de los ríos Limay y Neuquen.
Se trata de la zona del río Limay en cercanías de la presa de Alicurá, una de los embalses que en no más de 10 días dejarían de funcionar, de acuerdo a las estimaciones que se emitieron desde la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas.
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Roca.- Las imágenes que acompañan este artículo son por demás elocuentes de la situación de escasez de agua en la cuencia de los ríos Limay y Neuquen.
Se trata de la zona del río Limay en cercanías de la presa de Alicurá, una de los embalses que en no más de 10 días dejarían de funcionar, de acuerdo a las estimaciones que se emitieron desde la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas.
Ante este panorama, ayer se confirmó que se incentivarán las medidas de restricciones energéticas a nivel nacional.
Mientras que pese a que las autoridades de AIC se encargaron de resaltar en cuanta declaración hicieron, que no se afectará el agua para consumo humano y para riego, existe incertidumbre en este punto.
Es que frente a la bajante en los caudales, se esperaba tener una apreciación más en detalle sobre los inconvenientes, y los efectos que esta situación derivará, por caso, en la toma de agua sobre el río Neuquén, en el dique Ballester, para alimentar el inmenso sistema de riego del Alto Valle.
Productores y consorcistas de riego de la zona analizaron este aspecto y procuraban tener más detalles sobre cuál sería la magnitud de la bajante con sus consecuentes problemas.
Productores de la zona recordaron ayer que desde la segunda quincena de agosto ya comienza a ser requerido el agua en los canales que surcan la superficie productiva. Por lo que los inconvenienes planteados derivarán en incertidumbre respecto a lo que pueda llegar a ocurrir.
Se recordó que el canal principal de riego, el que distribuye el agua en el Alto Valle a lo largo de más de 130 kilómetros, necesita de un caudal promedio de 70 metros cubicos/segundo. Ese volumen no estaría garantizado, según las primeras evaluaciones, aunque habrá que aguardar a conocer detalles sobre la evolución del caudal del rio Neuquén en las próximas semanas.
Por otra parte, la escasa cantidad de agua en la cuenca derivará en menor volumen también en el río Negro. De él se alimentan practicamente todas las ciudades que conforman el corredor a la vera de la ruta nacional 22.
Por lo que la incertidumbre respecto al abastecimiento para consumo de la población también fue creciendo, mientras diametralmente bajaba el nivel de las aguas. Ayer se puso la mirada también en las tomas de agua para abastecer a algunas localidades, las que podrían tener inconvenientes en caso de seguir la bajante.
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