Título: RIO NEGRO: LOS RIOS ALTOS ANUNCIAN UN INVIERNO COMPLICADO (23/05)(Rio Negro)
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Argentina - 23/05/2006
Ya están erogando el tope permitido para la estación. La crisis eléctrica requiere de más hidrogeneración.
NEUQUEN (AN) - Los altos caudales de los ríos que se registran por estos días aguas abajo de las presas son una muestra del modelo de operación de las centrales hidroeléctricas del Comahue que el gobierno nacional pondrá en marcha este invierno si las lluvias y las nevadas son abundantes. Para el sistema federal es imperioso contar con el aporte de la hidroelectricidad del norte de la Patagonia frente al escenario de escasez de gas en nuestro país.
Los que cruzan a diario por los puentes que van a Cipolletti vieron el aumento de los caudales del río Neuquén: a finales de abril era de 381 metros cúbicos por segundo y el promedio diario del domingo fue de 545.
En el río Limay el caudal medio diario de finales de abril era de 870 metros cúbicos por segundo y este domingo, de 1.070.
El río Negro –conformado por el Neuquén y el Limay– tuvo como promedio diario 1.626 metros cúbicos por segundo (medid a la altura de Allen), que es el máximo que, en condiciones normales, puede tener el curso en esta época del año.
Las condiciones normales son niveles en los embalses por debajo de una franja de operación para cada época del año. Los límites deben respetarse porque son es lo que resguarda las presas de un sobrepaso ocasionada por una creciente intempestiva.
Para las actividades de los valles que tienen íntima relación con el agua, una suba del río en esta época del año no provoca los mismos inconvenientes que en el verano.
Lo que las afecta son esencialmente las crecidas seguidas de drásticas bajantes porque, además de provocar daños en las riberas, obliga a cambiar permanentemente las tomas de agua.
Si se compara la situación actual de la cuenca respecto del mismo instante del 2005, puede apreciarse que los caudales medios diarios son superiores (el 20 de mayo del año pasado, el del río Negro era de 1.163 metros cúbicos por segundo) y que el embalse de El Chocón tenía un metro menos de agua que en la actualidad (equivale a decenas de millones de metros cúbicos de mayores reservas).
Hasta el 1 de mayo rigieron las restricciones para la liberación de agua hacia los valles agrícolas puesto que la producción precisa que el río se mantenga bajo.
Desde hace tres semanas, el tope de erogaciones desde Arroyito y El Chañar es el máximo permitido en el año.
Lo único que puede modificar este esquema de manejo de la cuenca es un nivel de los embalses que pueda poner en peligro la integridad de la presa.
El sistema eléctrico nacional precisa que todas las fuentes de energía que no usen gas -un combustible escaso en Argentina- como insumo generen la mayor cantidad posible porque de lo contrario deberían entrar en producción centrales térmicas que funcionan con fuel oil, lo que encarecería fuertemente los costos.
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