Título: Vientos auspiciosos para la energía eólica ..
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Argentina - 15/12/2004
Para 2007 la Argentina estaría en condiciones de aumentar en casi 12 veces su producción de energía eólica, pasando de 27 a 300 megavatios (MW), según un proyecto presentado por la Cámara Argentina de Generadores Eólicos (Cadge) durante la X Convención sobre Cambio Climático (COP10).
En 2013 sería el 8% del parque energético
Para 2007 la Argentina estaría en condiciones de aumentar en casi 12 veces su producción de energía eólica, pasando de 27 a 300 megavatios (MW), según un proyecto presentado por la Cámara Argentina de Generadores Eólicos (Cadge) durante la X Convención sobre Cambio Climático (COP10).
En la actualidad, el país cuenta con diez sitios diferentes en cinco provincias de generación de este tipo de energía, con una producción de 27 MW. La ciudad chubutense de Comodoro Rivadavia, con 24 aerogeneradores, es la de mayor potencia instalada, con 17,2 MW.
Según los especialistas, los montos totales que supondría este tipo de generación de energía, previendo una evolución de las tarifas del mercado eléctrico, serían de 300 millones de dólares a lo largo de 10 años. Esos recursos económicos se obtendrían del propio mercado eléctrico, que remunera a los generadores con los precios mayoristas de la energía.
"Lo que estamos presentando es un primer paso para que el país pueda cumplir con sus compromisos internacionales en materia de energías renovables", explicaron los autores de la propuesta. La Argentina adoptó el compromiso de alcanzar de manera conjunta con los países de la región el 10% de su matriz sobre la base de energías renovables, y ha presentado este año el compromiso de alcanzar el 8% de la generación eléctrica limpia en 2013. "Todavía esos compromisos no se traducen en políticas concretas", señaló Pablo Bertinat, de la Cadge.
Una segunda forma de financiamiento está prevista por la ley 25.019, la norma de energía eólica y solar, con dinero de un fondo específico por la aplicación porcentual a las transacciones de compraventa de energía en la Compañía Administradora del Mercado Mayorista de Electricidad (Cammesa).
La tercera opción de financiamiento es el Aporte para el Desarrollo Eólico (APD), cuyo costo, según los expertos, debería ser prorrateado entre los consumidores del Sistema Eléctrico Interconectado Nacional sin alcanzar a los usuarios de baja renta ni a los residenciales y rurales de consumo bimestral menor o igual a 300 kilovatios hora.
El director del departamento de Medio Ambiente del Banco Mundial, Warren Evans, aseguró que el 60% de la cartera de proyectos, unos 330 millones de dólares, se destina al área de energías renovables; el 25 por ciento corresponde a América latina.
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