Título: SANTA FE: GIUSTINIANI PIDIO INFORMES SOBRE LA HIDROVIA (23/03)
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Argentina - 23/03/2005
Criticó la falta de un organismo de concesión. Fuente: SM
El senador nacional Rubén Giustiniani pidió informes a la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, dependiente del Ministerio de Planificación Federal, sobre la concesión de la Hidrovía Paraná-Paraguay.
Giustiniani quiere saber si se realizaron estudios de impacto ambiental que permitan monitorear la evolución del sistema fluvial y de qué manera el dragado afecta las costas. Además, las medidas de prevención de los posibles perjuicios del dragado y, fundamentalmente, por qué aun no se ha constituido el órgano de control correspondiente.
En los fundamentos de su proyecto de resolución, el legislador socialista planteó que el reciente desmoronamiento de 500 metros cuadrados del Parque España pone en el centro del debate los riesgos de la falta de control del dragado realizado por la concesionaria de la Hidrovía. También la inexistencia de informes de impacto ambiental serios.
Giustiniani recordó que en 1995 se adjudicaron las obras de dragado del Río Paraná a un consorcio integrado por una empresa belga y firmas nacionales. El artículo 18 del pliego de bases y condiciones se refiere al funcionamiento del órgano de control. Luego, a raíz de un informe sobre el dragado publicado por el Taller Ecologista de Rosario en 1997, la Defensoría del Pueblo de la Nación inició un expediente de oficio y en septiembre de 1998 dictó la Resolución 4341/98, que recomienda a la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables de la Nación un estudio de impacto ambiental integral de toda la cuenca, previo a la aprobación de los planes parciales de gestión ambiental, y la concreción de un órgano de control de los dragados. En 2002, una auditoría de la SIGEN elevada al Subsecretario de Transporte por Agua y Puertos recomienda nuevamente constituir el órgano de control. Por último, la Oficina Anticorrupción emitió en abril de 2003 un informe de 42 páginas sobre la concesión, en el cual señala, entre otras irregularidades detectadas en la concesión, la inexistencia de un órgano de control independiente.
Un informe del subcomité técnico de la Asociación Civil Prácticos del Río Paraná, elevado al Subsecretario de Puertos y Vías Navegables el 11 de junio del año pasado sostiene que “se ha verificado un serio deterioro en el asiento de los muelles ... debido a la acción erosiva de las ondas de succión al pasar en sus proximidades buques con máximo calado. Esto es particularmente cierto en el Puerto de Rosario”. Por ello, “en tal zona sería menester, ya que existen las condiciones, realizar la traza por el canal oriental. Debido a la erosión por el paso de los buques, numerosas veces en años anteriores se han derrumbado muelles y caído grúas al agua en algunos casos, en Campana, Rosario y San Lorenzo. Por fortuna no hubo que lamentar pérdida de vidas. El canal de navegación principal no debe pasar nunca, si es posible, próximo a los muelles y terminales”.
“Se ha avanzado hacia la profundización del calado sin contar con estudios de impacto ambiental ni control alguno, sufriendo las márgenes del río un proceso de erosión acelerada”, expresó Giustiniani. “Durante los 10 años de concesión el Estado nacional se ha desentendido de su función de control y cuidado del río”, concluyó.
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