Título: BOLIVIA: EJECUTARAN PLAN NACIONAL DEL CUENCAS PARA MITIGAR DAÑOS POR INUNDACIONES
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Bolivia - 29/02/2008
El Gobierno tiene planeado ejecutar el Plan Nacional de Cuencas para mitigar los daños causados por las inundaciones en diversas regiones del país
La Paz, 28 feb (ABI).- El Gobierno tiene planeado ejecutar el Plan Nacional de Cuencas para mitigar los daños causados por las inundaciones en diversas regiones del país, para ello priorizarán las cuencas de los ríos Mamoré y Grande, que fueron los que en mayor medida provocaron daños.
"El Plan Nacional de Cuencas tiene una intervención a nivel de todo el país, pero existen temas que se debe priorizar, en ese sentido están las cuencas de los ríos Mamoré y Grande", dijo el viceministro de Cuencas y Recursos Hídricos, Germán Aramayo.
Añadió que el trabajo en los dos afluentes será de modo integral en sus partes altas, medias y bajas, a través de la construcción de represas con la finalidad de retener el agua y que estas no bajen con la velocidad que lo hacen causando desbordes y daños en la propiedad y personas.
En la parte baja de ambos ríos se tiene proyectado trabajar en la regulación de los caudales para evitar inundaciones en las poblaciones de San Julián, Cuatro Cañadas, El Torno, San Pedro y otros del departamento de Santa Cruz, además del Beni, Pando y Tarija, dijo Aramayo.
"Hay que tratar de recuperar suelos para la producción y hay que trabajar en la forestación. En la parte baja tenemos aproximadamente seis proyectos para Santa Cruz", indicó la autoridad de Gobierno.
En la parte alta de las cuencas de los ríos Mamoré y Grande, que implica a Cochabamba y Chuquisaca de donde bajan las aguas, también se realizarán obras para retener los caudales al igual que en sus partes medias.
"Estas aguas tienen que utilizarse para generar energía eléctrica y para el riego", apuntó Aramayo.
Para el Viceministro de Cuencas, dependiente del Ministerio del Agua, tanto las poblaciones del Beni como de otras regiones deben aprender a vivir con el agua, a través de medidas preventivas como la construcción de viviendas a una altura considerable del suelo y que sus plataformas sean regulables.
"Tenemos que aprender a vivir con el agua porque los cambios climáticos no se van a detener, en ese sentido los nuevos asentamientos tienen que tener una nueva característica de sus edificaciones", explicó.
El funcionario de Estado remarcó que el periodo más crítico del fenómeno climático de La Niña fue en el mes de enero y parte de febrero, por lo que según estudios técnicos el nivel de las aguas a nivel nacional bajó considerablemente en los últimos días.
"Tenemos 54 proyectos para la gestión 2008, pero estos tienen una duración de dos años", apuntó la autoridad.
Entretanto, datos del Ministerio de Defensa indican que hasta el jueves se registraron en todo el país alrededor de 76 mil familias afectadas, de ellas, unas 38 mil son damnificados, además de 62 personas fallecidas por circunstancias de los fenómenos naturales.
Fas/Pta ABI
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